CLUB DEPORTIVO FAS

CLUB DEPORTIVO FAS
FAS TU PUEDES...

martes, 6 de abril de 2010

No diga fútbol, diga Messi

No diga fútbol, diga MessiLeo Messi se hizo dueño en el Camp Nou del fútbol mundial. Una auténtica exhibición, un poker de goles y una maravilla futbolística que le sitúa como el mejor jugador del mundo. Y sin discusión


Messi es felicitado por sus compañeros Foto: EFE

MÁS INFORMACIÓN

Así vivimos el Barça-Arsenal al minutoEl Barça-Arsenal, en anécdotasLo mejor y lo peor del Barça-ArsenalEnvíanos tu titular del Barça-ArsenalLa imagen del Barça-ArsenalJosep Capdevila

¿Y ahora cómo lo explico eso? Esa es la pregunta que se hace el periodista cuando tiene que narrar otro, el enésimo recital, la enésima exhibición, el no va más, el... de un jovencito de 22 años que está dispuesto a hacer sufrir a los rivales que tiene por delante y a los periodistas que tenemos que explicarlo. El resto del mundo, eso si, se lo pasa pipa con él.



Supongo que no es necesario explicar que estamos hablando de Leo Messi. El hombre, el joven capaz de empequeñecer todo lo que hacen lo que están a su lado, se llamen Xavi, Iniesta, Ibrahimovic... Da igual. Messi es la solución a todo. Cualquier problema que puedas tener, él te lo soluciona.



Al Barça, ante el Arsenal, se le presentó un problema cuando en el minuto 18, los ingleses se adelantaron en el marcador, con un gol de Bendtner, tras un rechace de Valdés a otro disparo suyo. Pero Messi no quería que nadie tuviera ni tiempo para preocuparse. Él solito se inventó una jugada, aprovechó un rechace de Silvestre que pareció una asistencia y gol con un disparo desde el borde del área.



Y no se piensen que esto era lo primero bueno que hacía Leo. No. En el minuto 4 ya había hecho lucirse a Almunia con un fuerte disparo que el portero desvió a córner. Y en el 11', otro disparo suyo se fue fuera por muy poco, llegando a tocar la red superior.



Tras el 1-1, no se acabó la exhibición de Messi. Que va. Al contrario. Parece claro que el gol de Bendtner le había picado de mala manera. Y su venganza fue terrible. Dio otro aviso mandando al lateral de la red un disparo en el 31' tras jugada individual. Y en el 36', llegó el segundo gol. Fue una combinación de lujo con la participación de jugadores como Abidal, Xavi o Pedro, entre otros y rematada como sólo sabe hacer él del delantero argentino. Otra 'barraca'.



¿Era suficiente para irse tranquilos al descanso? Pues no. Faltaba otra genialidad. Keita le pasó un balón con la cabeza y ala, a correr. Leo se fue como una bala hacia la portería y a la salida de Almunia le batió con una espectacular vaselina. Era el 3-1 y, ahora si, al descanso para poder repasar mentalmente todo lo que había mostrado Leo Messi.



LESION DE ABIDAL



Aún con el "shock" por lo visto en el primer tiempo, los dos equipos saltaron al terreno de juego en la segunda parte. Y el partido enloqueció un poco. El Arsenal tenía que ir a por todas para marcar dos goles y ello le obligó a abrir líneas, lo que favorecía las contras de los hombres de Pep Guardiola.



Los minutos fueron pasando sin noticias, lo cual ya era bueno para el Barça. Bueno, sí que hubo una noticia, y mala. En el minuto 7, Abidal tuvo una nueva lesión muscular y tuvo que ser sustituido por Maxwell.



El Arsenal siguió buscando el gol que les metiera de nuevo en el partido y el Barça esperaba que pasaran los minutos y a ver si encontraban una contra letal para acabar la exhibición. Pudo ser letal una contra montada por Messi con inteligencia sacando rápidamente una falta para Pedro, que se fue solo hacia portería, pero su disparo a la salida de Almunia salió fuera (25').



Los ingleses dieron un susto poco después con un remate de Bendtner que se estrelló en el poste (26') pero la jugada estaba anulada por fuera de juego. Y los minutos siguieron pasando, con el Barça que quería el balón, que iba confeccionando sus rondos cada vez más largos y con el Arsenal corriendo mucho detrás del balón.



Iniesta entró por Pedro (40') para tener unos minutos tras su lesión y Maxwell tuvo el 4-1 en sus botas (86') pero Almunia le detuvo su lanzamiento. Pero el portero español nada pudo hacer un minuto después, cuando Messi chutó, despejó con los pies, pero nada pudo hacer ante el segundo remate del argentino. Al fondo de la red. Y por debajo de las piernas del portero.



Era la guinda. El punto y final a una noche inolvidable para Messi y para todos los que amen el fútbol con letras mayúsculas. El Barça ya está en semifinales. El Inter espera. Y en Madrid empiezan a saber lo que es el canguelo que nos vendían el año pasado pensando en lo que puede pasar el sábado...

No hay comentarios:

Publicar un comentario