FAS dio un paso firme en las aspiraciones de llegar a la final del Apertura 2008. Una victoria 1-3 sobre Metapán en el mismo “Calero” Suárez, el fortín calero, le hace llegar con ventaja al partido de vuelta del próximo fin de semana en el Óscar Quiteño.
LLUVIA DE GOLES
En el segundo tiempo del partido, Metapán intentó reaccionar y se encimó por completo, pero aunque fue peligroso, eso lo pagó caro porque permitió muchos espacios atrás, con lo que FAS logró por fin abrir el marcador.
En el 55', cuando FAS estaba defendiendo, Alejandro Bentos rechazó una pelota que llegó al paraguayo Osvaldo Mendoza, quien superó en velocidad a sus marcadores Dowson Prado y Ernesto Iraheta, los dejó tirados y en la salida de Dago Portillo le tocó suave por sobre su cuerpo. 1-0.
Tras el gol, la obligación de Metapán por anotar se volvió una urgencia, adelantó aun más sus líneas y se debilitó en defensa.
Fue en eso cuando, otra vez, Bentos robó una pelota a Mejía y centró para Mendoza, quien adentro del área y frente a la portería, definió con un solvente disparo que dejó sin ninguna oportunidad a Portillo, al 75', para el 2-0 santaneco.
Los caleros se vinieron abajo tres minutos después, cuando Alejandro Bentos marcó el tercer gol, al desviar un tiro de Pacheco "con la cola", el cual desubicó a Portillo. Era un 3-0 ya lapidario.
Para FAS, ya casi todo era fiesta, pero tuvo que soportar el descuento, anotado por Héctor Mejía al minuto 90.
“FAS fue mejor que nosotros, no creo que podamos remontar este marcador. Regalamos este partido, pero me queda la duda del tercer gol, el de Bentos.”
(Edwin Portillo, técnico de Metapán)
“Estoy muy feliz por los goles, pero lo más importante es que el equipo ganó y se sacó el resultado que se esperaba. Gracias a Dios las cosas se me dieron.”
(Oswaldo Mendoza, delantero de FAS)
Un amigo le dice a otro:
ResponderEliminar-Fíjate que mi mujer se fue con un tipo.
-Que barbaridad, pero es mejor que la olvides. Vamos a tu casa a ahogar esa tristeza con alcohol.
-No tengo, -responde el individuo-.
-Ahorita compramos, eso no es problema
-No, lo que no tengo es tristeza.
Un compadre le dice a otro:
ResponderEliminarOiga compadre, a mi se me hace que mi vieja me engaña.
¿Por qué compadre?
Mire, ayer llegué a mi casa tarde y me acosté y en la mañana que me levanto tarde y muy aprisa me visto y que me voy a comprar carne y me dice el carnicero: ¿Oiga por qué viene vestido de lechero?